Agresiones exteriores y interiores
Existen multitud de clínicas que ofrecen consultas con profesionales cualificados para hacer un seguimiento a aquellas personas que padecen problemas capilares. El cabello suele caerse más en otoño y en primavera, pero fuera de su ciclo no es algo normal. Tanto el cabello como el cuero cabelludo sufren por las agresiones externas, que pueden venir por dos vías diferentes. Las naturales son el frío, el calor, la contaminación, el agua salada o el sol, mientras que las artificiales hacen referencia al uso de aparatos eléctricos como tenacillas o secadores. El cabello no es inmune y estas circunstancias hacen que se deshidrate y se convierta en un pelo rebelde y débil. Sin embargo, no todas las agresiones vienen de fuera y nosotros mismos podemos provocar su caída por estrés o al llevar una mala alimentación.
Anomalías del cabello
Son varias las anomalías que puede sufrir el cabello. Es posible sufrir picores, seborrea o descamación, así como fragilidad (cuando se rompe con facilidad) o puntas abiertas. Disponer de un equipo de análisis capilar idóneo es la solución para observar el estado externo e interno del cabello. De esa manera se obtendrá un diagnóstico para establecer el tratamiento a seguir. En el análisis de cabello se suele observar si el pelo tiene densidad, color, brillo y fuerza, entre otras cosas. Para ello se reconomienda hacer un análisi capilar una vez al año para prevenir cualquier poblema. Y es que suele ser bastante habitual, más de lo que imaginamos, padecer alopecias, descamaciones, así como alteraciones en el brillo y la pigmentación.
¿Por qué es tan importante el análisi capilar?
Normalmente, suelen utilizarse micro cámaras para analizar detenidamente el cabello, si cuenta con el grosor o el color adecuado y si existe cierto desequilibrio. A algunas personas se les cae demasiado el pelo, aunque también tienden a regenerarlo. El análisis del cabello servirá para determinar si el crecimiento del cabello es el adecuado. De hecho, lo más importante es que el pelo se regenere en la misma proporción que la pérdida sufrida y con el mismo grosor. En aquellos casos en los que el pelo nuevo sale más fino o se regenera en menor cantidad, hay que hacer un método concreto.
Tratamientos para frenar la caída del cabello
Existen muchos tipos de tratamientos capilares, algunos de ellos están de venta en farmacias, peluquerías y supermercados. Suele ser habitual tomar suplementos vitamínicos combinados con otros productos de uso exterior que concedan nutrientes al cabello. Sin embargo, hay otros procedimientos más potentes utilizados cuando el componente genético hace su aparición, algo que resulta más difícil de tratar.